El fútbol es un deporte que se juega con 11 jugadores por equipo, más 5 suplentes, y al parecer el Valencia no está muy al tanto de esto.
Actualmente, en el fútbol se utilizan dieciséis jugadores, lo cual contrasta con la tradición de utilizar once jugadores. Esto se debe a las nuevas reglas que permiten realizar cinco cambios por partido y a la necesidad de mover piezas estratégicamente desde el banquillo.
El Valencia tuvo dificultades contra el Real Madrid, al igual que ha experimentado a lo largo de toda la temporada. Los suplentes que ingresan al campo son considerablemente menos efectivos que los titulares habituales. Estos hechos no son opinión sino una realidad objetiva: el Valencia es el equipo menos efectivo en la segunda mitad de los partidos en términos de anotaciones.
Tomando como referencia una situación reciente, en el último partido se produjeron modificaciones en el equipo, con la participación de Guillamon, Canos, Dani Gómez y Jesús Vázquez. En concreto, Guillamon estuvo involucrado en los dos goles en la imagen, mientras que en el segundo gol se pudo observar una falta de intensidad por parte de Canos.
Por tanto, se están solicitando refuerzos desde los sectores externos al club, en lugar de hacerlo desde dentro, para mejorar la situación del equipo. Aunque el equipo tuvo un buen desempeño recientemente, lo más importante en este momento son los puntos que le permitan salir de la difícil situación en la que se encuentra.
En la actualidad, los fichajes no generan mucha confianza, aunque se ha concretado la contratación de Sadiq, quien ya se encuentra en proceso de entrenamiento en la ciudad deportiva de Paterna. Tras varios meses de rumores, parece que la posibilidad de fichar a Fresneda para el lateral derecho se desvanece, por lo que se buscará otra opción. Y no se sabe qué otra pieza puede aparecer.
Pero en última instancia, cada persona puede verlo y interpretarlo a su manera. Lo que parece evidente es que después de un desastroso mercado de verano con fichajes inútiles por parte del Valencia, el director deportivo sigue en su puesto a pesar de haber llevado al equipo al descenso desde su llegada en Champions.
De hecho, al finalizar el artículo y regresar al juego contra el Real Madrid, se han publicado muchas cosas en los medios de comunicación. Sin embargo, desde el punto de vista de alguien que estuvo presente en el partido y pudo comprobarlo por sí mismo debido a su trabajo, lo único que se le dijo a Vinicius fue "tonto". No hubo insultos, ni comentarios racistas, ni ningún otro adjetivo similar que se intenta atribuir a una afición que se comportó de manera ejemplar y tuvo un debate sano con el equipo rival.
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