El brasileño Raphinha está experimentando su mejor temporada desde su llegada al FC Barcelona.


 El brasileño Raphinha está experimentando su mejor temporada desde su llegada al FC Barcelona. Con un total de 27 goles y 20 asistencias en 42 encuentros, se ha consolidado como un pilar fundamental del equipo dirigido por Hansi Flick. Su influencia en el ataque del conjunto azulgrana ha sido tan marcada que algunos lo consideran como un posible candidato al Balón de Oro. 


No obstante, a pesar de su destacado desempeño, el extremo brasileño no se siente seguro respecto a su futuro en el club. En el Camp Nou persiste la incertidumbre acerca del próximo mercado de fichajes, y los rumores sobre una nueva contratación ofensiva han generado inquietud en el vestuario. 


El temor de Raphinha ante la llegada de un nuevo refuerzo


Diversas fuentes indican que la dirección encabezada por Joan Laporta y el director deportivo Deco están diseñando la plantilla para la próxima temporada. Uno de los objetivos sería incorporar a un delantero con un perfil diferente al de Raphinha, que sea más vertical y con una mayor capacidad de desborde. 


Frente a esta eventualidad, el futbolista brasileño ha decidido no permanecer inactivo y ha tomado la iniciativa. Según información proveniente de círculos cercanos al club, Raphinha se reunió directamente con Laporta para manifestar su inquietud. El atacante dejó claro que no desea un refuerzo que pueda amenazar su estatus en el equipo. 


No solo expresó su descontento, sino que también propuso alternativas. En el caso de que el Barcelona persista en este fichaje, el brasileño habría sugerido que el jugador en cuestión no se una al Camp Nou, ya que considera que podría adaptarse mejor a otro club. 


Un líder en el esquema de Flick


Desde la llegada de Hansi Flick, Raphinha ha adquirido un papel más relevante en el ataque culé. Su versatilidad para desempeñarse tanto como extremo como en otras posiciones ofensivas lo ha transformado en una pieza clave, aunque su función principal se mantiene en la banda izquierda, la misma área donde el club busca el refuerzo. 


Si bien comprende que el Barcelona debe fortalecerse, el brasileño opina que no es el momento adecuado para introducir competencia directa en su posición. Confía en su rendimiento, pero también es consciente de que las nuevas incorporaciones pueden alterar la jerarquía dentro del equipo. 


Por tal motivo, ha decidido establecer límites y dejar claro su descontento antes de que sea demasiado tarde. La decisión ahora recae en la directiva, que deberá determinar si prioriza su continuidad o si opta por un nuevo fichaje que podría comprometer su futuro en el club. 

Publicar un comentario (0)
Artículo Anterior Artículo Siguiente